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5 comentarios en “¡Contacta con nosotr@s!

  1. Cuanto más leo el MANIFIESTO (y las propuestas que lo acompañan) de DRY más me gusta. Me da la impresión de que cuando la cordura y el sentido común se asiente el resultado sólo puede ser muy positivo. Creo también que aunque Burgos sea una ciudad muy pequeña y poco representativa, de ella pueden salir propuestas razonables con amplio apoyo en ámbitos superiores.
    También creo que muchos de los puntos del manifiesto no son viables a nivel local, ni siquiera nacional, por lo que el éxito de este movimiento va a depender en buena medida del eco y apoyo que a nivel internacional se consiga en la sociedad.
    No debe dejarse de lado el desarrollo del manifiesto en los debates de las comisiones y asambleas pero, si se quiere alcanzar una mayor IMPLICACION de la gente, se debe dedicar una parte de esas discusiones a valorar el día a día de la actividad local y autonómica de nuestro entorno, que es el que nos pilla más cerca y el que de forma más directa nos afecta. Cuestiones ya asumidas en todas las asambleas como la transparencia de las instituciones y mayor representatividad política, dista mucho de estar mejorando aquí, en casa.

    RECOMENDACIONES EN CASO DE SER DETENIDO POR LA POLICIA


    http://www.democraciarealya.es/?page_id=234

    • Antes de todo, ¡perdona!, para mi ortografía. Quiero decir, que es necesario luchar para la libertad de prensa. En España, mass-media habla de todo, menos de lo que es más importante para parar el infección que es esl grupo Bilderberg y su conspiracion sobre de la humanidad. Estoy de Rumania, y vivo en España para recuperar mi libertad y mi derecho de decidir para mi futuro. Igual se pasa para toda la humanidad. Nadie no es libre, tanto tiempo se permite, que un grupo de pocas personas, van decidir para todo el mundo. Nosotros, en unidad podremos parar o cambiar el sistema, los pensamientos de Rockefeler.

  2. Nos estamos equivocando, yerrando el «tiro»; hay mil millones de maneras de provocar el movimiento del Elefante sin que éste pueda evitarlo, mil millones de provocar su paralización, mil millones de que, al final, barrute.
    Es la estrategia Gandhi, de Luther, de gente similar; la no violencia la tenemos por bandera, pero hay que dar un paso adelante, como aquella negra que se negó a ceder su asiento del autobús a un blanco sólo porque éste era blanco. Se trata de hacer lo mismo, de provocar el colapso del sistema y que este colapso genere nuevos ideales y formas de hacer las cosas, como las que se refiere el Manifiesto.
    Por ejemplo, qué necesidad de reunirse en una sola plaza, de convocar una sola manifa en un sólo sitio, pidamos varias en varios sitios el mismo día y a la misma hora, es nuestro derecho y no la puede denegar la Subdelegada ni nadie, qué hará, distribuir a la escasa policía?, cerrar al tráfico toda la ciudad? hoy la pedimos en este sito, mañana en otro, al siguiente en el de más allá, Inundemos a la Administraciones de petiiciones y solicitudes a las que nuestra Constitución nos da derecho, sea una manifa, una asamblea o una situación de dependencia de los millones de personas que esta crisis ha dejado en la estacada; se bloqueará seguro, distribuyamos esas peticiones en todas las Administraciones, la municipal, la provincial, la autonómica y la nacional, qué pasará? Sencillamente que el sistema tendrá que pedir que vuelvan a sus trabajadores de vacaciones, a los excedentes, a los que están de moscosos, a los de baja no médica, a los de comisión de servicio, a todos, para poder atender tantas peticiones; el sistema funciona con silencio positivo, por lo que si pasado un plazo no responde, esa petición está concedida.
    El Elefante no está preparado para reaccionar ante situaciones como las de esos compañeros que acudieron a urgencias en Cataluña para protestar por el cierre nocturno del servicio; hablo de multiplicar medidas sencillas como ésta en todo el país; al final el Elefante terminará por resetearse, y por echar a patadas a sus jerifaltes de sus poltronas. No pueden estar a todo ni a todas, somos más agiles que él y que ellos, hablo de GUERRILLA CIVIL, la misma que hacían nuestros antepasados ante cualquier invasor: conocían el terreno y le dividían las fuerzas y le VENCIAN; esto ya se hacía con Anibal, no invento nada, sólo los fines y los métodos: civiles, democráticos, pacíficos
    Sé cómo fastidiarles, y como provocar el cambio; tenemos unas elecciones convocadas para dentro de 4 meses, os imagináis que hará el nuevo Parlamento ante un aluvión de iniciativas legislativas? sencillamente lo colapsamos para discutir nuestras propuestas, no las suyas (que ni siquiera son las que vengas en sus programas electorales); y si podemos colapsar al Parlamento, imaginaros otras administraciones y entidades, más burocráticas e inmovilistas como el Elefante que las sustenta. 500.000 firmas para una iniciativa, las conseguimos en nada en el clima actual, multiplica las mismas firmas, por X iniciativas de las que figuran en el manifiesto de DRY… SENCILLO Y EFICAZ.
    Nada más por el momento, SALUD y ANIMO.

    Turmo

  3. Hola os paso el último post de mi blog «hay vida en el páramo» sobre la reforma constitucional.

    OBRAS Y REFORMAS CONSTITUCIONALES, S.L.

    Recuerdo que me gustaba el derecho constitucional. Sendos sobresalientes en la asignatura podrían avalarme para respaldar esta pequeña digresión sobre la reforma constitucional pero me temo que no será suficiente si tengo en cuenta que ZP de lo único que entiende es de derecho constitucional y vean la que ha preparado.
    Cuando estudiaba derecho político –después constitucional- uno tenía la sensación de que se trataba de palabras mayores, de renglones de trazo firme y solemne. Leías con voz alta y clara el párrafo segundo del artículo primero “la soberanía nacional reside en el pueblo español, del que emanan los poderes del Estado” y te quedabas como Dios. Estado con mayúscula. El pueblo español –ahora veo que va en minúscula, toda una premonición-.
    Han tenido que pasar treinta y tres años (salvando el retoque en extranjería en los noventa) para ver una reforma sensible de la Carta Magna. Edad simbólica donde las haya, edad en la que ocurren cosas terribles, desde el martirio a la profanación.
    La madrugada del viernes 2 de septiembre de 2011 alguien vio entrar por la trasera del Congreso de los Diputados una furgoneta que ponía en el lateral “Obras y reformas constitucionales, S.L.., Presupuesto sin compromiso, teléfono móvil, la dirección en no se qué naves , ….”. La empresita en cuestión trabaja bien porque a mediodía del viernes la reforma estaba lista, no quedó del todo pulida como quería el cliente PPSOE porque finalmente no consiguieron convencer a CIU ni a PNV y las enmiendas transaccionales fueron vetadas por IU.
    Los impulsores de la reforma constitucional (algo más que una mera medida anticrisis) tratan de explicar que nos va la vida en ello. Al prestidigitador González le place incluso entrar en esta vía de enmiendas u obras menores, dice que es como ocurre en Norteamérica. Los nacionalistas y los grupos minoritarios enfadados lógicamente porque no han contado con ellos. En el caso de los nacionalistas suena un tanto impostada la crítica ya que si bien es imperdonable el defecto formal, sin embargo comparten básicamente el fondo. Mezquino resulta simplemente sugerir que Cataluña o Euskadi podían haber escapado a la regla general. Se entiende el cabreo pero hay que rebajarlo si tenemos en cuenta que por mor de la Ley Electoral están sobrerepresentados en el Congreso. Al contrario que los grupos minoritarios, que están subrepresentados al tener los votos dispersos en la mayoría de las circunscripciones electorales. Y PP y PSOE saben que su noventaitantos porciento no es tan brillante como pueda parecer. Sus caras a la salida les delataban.
    Con independencia del fondo del asunto, del proceso concreto y del sentir de los actores políticos, el bombazo ha sido comprobar que lo que ya sabíamos –que ningún estado nación es hoy dueño de su destino- ha pasado a tener correspondencia formal.
    Me llamó la atención esta primavera una de las pancartas de las protestas del 15M que decía “Poder constituyente, ya!”. La realidad es tan aplastante que supera rápidamente los enunciados formales. Hemos constatado la pérdida de la facultad constituyente.
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